Exigen que se acerquen al menos al 60 por ciento de la estructura de costos
Los odontólogos salteños continúan expresando su preocupación respecto a los bajos aranceles que reciben de parte de las obras sociales, prepagas y mutuales. Aunque aún no han tomado la decisión de suspender la prestación de servicios, aguardan una respuesta de estas entidades, a quienes ya han notificado sobre su inquietud.
En un esfuerzo por hacer eco de su inquietud, las líderes de las agrupaciones que representan a los profesionales de la odontología realizaron una conferencia de prensa en la Asociación Odontológica Salteña, ubicada en la calle España 1175.
Claudia Tejerina, presidenta de la Asociación Odontológica Salteña, explicó que son las instituciones las encargadas de establecer acuerdos con las prepagas, obras sociales y mutuales. Sin embargo, estos convenios se caracterizan por ofrecer aranceles notoriamente bajos que no alcanzan a cubrir sus costos operativos de los profesionales.
Tejerina ejemplificó esta situación mencionando que, en una prestación de 10 mil pesos, la prepaga solo cubre el 40 por ciento, dejando una brecha significativa sin cubrir: «La única que se beneficia es la prepaga que ofrece a sus afiliados un 100 por ciento de atención odontológica y nos paga por la prestación de los profesionales un 40 por ciento» aseguró.
La odontología ha sido, según Tejerina, la variable de ajuste en esta ecuación durante muchos años, y las únicas beneficiadas parecen ser las prepagas que ofrecen a sus afiliados una atención odontológica al 100 por ciento, mientras que solo pagan a los profesionales el 40 por ciento de la prestación.
Las entidades que agrupan a los odontólogos salteños solicitan a las obras sociales, mutuales y prepagas que se acerquen al menos al 60 por ciento de la estructura de costos para asegurar una atención adecuada.
Además, los profesionales enfrentan el desafío de insumos en su mayoría importados, que no han podido cubrir debido a los aumentos significativos posteriores a las elecciones PASO. Las restricciones en las importaciones también han afectado la disponibilidad de materiales de alta calidad.
Ante esta situación, hacen un llamado a las autoridades responsables de regular y establecer precios: «A la Superintendencia que es la que regula o normaliza. Nos tiene que escuchar», enfatizó.
Claudia Tejerina concluyó señalando que la población es la principal perjudicada en esta situación, ya que la atención odontológica es esencial para la salud, y es hora de que alguien asuma la responsabilidad de abordar estos desafíos. A pesar de los intentos desde diciembre de 2022 de comunicarse con la Superintendencia a través de las entidades representativas, aún no han recibido una respuesta satisfactoria.
Fuente: vocescriticas.com