Vecinos aseguran sufrir de episodios de violencia e inseguridad, a raíz de la presencia de la carpa bailable.
La carpa de zona norte no hace más que causar indignación entre los vecinos. No solo debió ser sancionada por no limpiar el predio y dejarlo cubierto de basura, sino que además, no garantiza la seguridad por los alrededores. Varias disputas se han efectuado a la salida del evento.
Todo esto, ha obligado a los residentes de barrio Pereyra Rosas a elaborar una carta, cuya destinataria es la interventora de Espacios Públicos, Susana Pontussi. Allí le solicitan el cierre inmediato de la carpa, o en caso de no ser posible, aumentar la seguridad por horas de la noche.
Más de 50 firmas se han recaudado en torno a este petitorio, que busca evitar que incidentes de violencia vuelvan a suceder. En este sentido, una vecina detalló cómo 20 personas, en evidente estado de ebriedad, iniciaron una pelea a la salida de la Carpa bailable.
Debieron ser detenidos por Infantería, quien arremetió con balas de goma. Por si fuera poco, algunas personas huyeron hacia propiedades que no están cerradas todavía. Causó conmoción e inseguridad entre los habitantes del barrio.
Asimismo, denuncian que sus viviendas son utilizadas como “baños” y sufren de ataques a medianoche. Muchos vecinos arriban a sus hogares tarde y padecen de intentos de robo; tal y como le sucedió a un salteño que fue agredido dentro de su vehículo.
“En caso de que no se cierre la carpa, porque también uno contempla que pueden haber contratos de por medio, creemos que debe haber más control policial a la salida”, comentó una vecina en diálogo con un medio local. Esperan que de esa forma, se eviten nuevas disputas y robos.
Fuente: vocescritocas.com