Salta, provincia que vive en emergencia por violencia de género hace varios años, sumó un nuevo hecho de sangre contra una mujer. Esta vez, el horror ocurrió en una finca en Tartagal, donde una joven de 36 años fue asesinada y su cuerpo fue arrojado a una letrina, donde la encontró la Policía la noche del sábado, tras realizar tareas de rastrillaje.
De acuerdo a la reconstrucción que se puede realizar con datos aportados por la Policía de la Provincia y el Ministerio Público, en la mañana del sábado, el hijo del propietario de la finca se hizo presente en la propiedad para hablar con el encargado, indentificado como Juan David Benítez (32 años), y no lo encontró.
Regresó en horas de la tarde y al acercarse a la casilla donde vivía, lo encontró con el torso desnudo y con manchas sanguinolentas en el cuerpo. También pudo apreciar que había una mujer desnuda, con algunos signos de violencia y presentaba lesiones en el rostro. El sereno le contó -en ese momento- que la chica estaba con él y que la noche anterior había salido a tomar.
El joven -contó luego a los efectivos- que sintió temor, por lo que decidió retirarse del lugar, dar aviso a su padre y poner en conocimiento de la situación a la Policía. La finca está ubicada sobre la ruta 34, a unos dos kilómetros de la ciudad de Tartagal.
Cuando llegó el personal policial a la casilla que ocupaba el encargado, éste dijo que la mujer se retiró por sus propios medios del lugar, lo que no pudo ser verificado. De acuerdo al informe policial, en el lugar se encontraba una mochila con prendas de vestir de mujer, cartera y documentación, por lo que se logró verificar la identidad de la víctima.
El sospechoso fue identificado como Juan David Benítez (32 años) y se desempeña como encargado de la finca, fue detenido y será imputado en las próximas horas por el delito de femicidio, contra Adriana Carina Ruiz (36 años).
En ese momento se montó un amplio operativo de rastrillaje ante la posibilidad de que se encontrara lesionada, pero el desenlace fue mucho peor. A unos 150 metros dentro de la finca, los efectivos encontraron el cuerpo semienterrado y tapado con hojas y tierra. La víctima fue arrojada en una especie de letrina.
El cuadro era dramático, ya que, de acuerdo a lo que se informó, para matar a la joven Benítez habría utilizado un pedazo de concreto de gran tamaño, ya que el mismo fue encontrado en la escena del crimen y tenía manchas sanguinolentas. Otro detalle macabro es que habría utilizado una carretilla para realizar el trasladó del cuerpo hasta el lugar donde lo ocultó.
El cuerpo de la víctima fue trasladado a la ciudad de Orán para que se le realice la autopsia en el Servicio de Tanatología Forense del Cuerpo de Investigaciones Fiscales y así determinar la data y la causa de muerte en forma fehaciente.
La causa está en manos del fiscal penal de la Unidad de Graves Atentados contra las Personas de Tartagal, Pablo Cabot, quien explicó que se dispusieron numerosas medidas y que personal policial trabaja en las tareas investigativas tendientes a esclarecer lo sucedido.
Esta nueva muerte no hace más que encender luces de alarma, teniendo en cuenta que la provincia presenta altos índices de femicidios.
Por esta razón urge que las autoridades tomen cartas en el asunto y se profundice el trabajo que se viene haciendo para proteger la vida de las mujeres.